Sociedad, margina y morirás

Con este verso de la inmensa "A tumba abierta" de Miguel Ríos comienzo este nuevo vómito. En estos días convulsos son muchos los que opinan que se avecina algo gordo. Una guerra civil o una división social a gran escala se antojan inminentes y la mayoría de los españoles (nacidos aquí me refiero) nos sentimos que estamos dentro de un gran banco de peces pero sin saber ni adónde vamos ni cuando llegaremos. Para más INRI la Iglesia (S.A.) se mete para echar más leña al fuego y recuperar ideas y acciones anquilosadas y pasadas de rosca. En primer lugar empezó la polémica con los intentos por destruir la obra de Montoya, un fotógrafo que ha vestido a sus modelos porno de Cristo y la Virgen (entre otros santos). A mí me sigue pareciendo un libro porno y también considero que el artista se ha pasado un poco de voltaje, ya que, al fin y al cabo, la Iglesia tiene miles de puntos flacos para atarcarla y la religión es una cosa totalmente ajena a los que negocian con ella. Luego ha venido la prohibición de que la gente de PRISA informe de cualquier acto religioso. La verdad es que esto es inaudito en el siglo XXI, pero claro ,si tenemos en cuenta que no tenemos democracia, que la dictadura no terminó en el 75 y que entre médicos, militares, curas, abogados y funcionarios esto sigue siendo una casa de putas, pues mire usté, poco ha llovido para cómo estaba el cielo.